Santiago de Chile.- Cada día parece más lejana la renuncia del entrenador argentino Marcelo Bielsa a la selección de fútbol de Chile, ya que en medio de conversaciones para ratificar su continuidad, no descuida su trabajo y prepara el amistoso contra Paraguay.
La teleserie en torno a la permanencia de Bielsa en Chile, que comenzó con su anuncio público de retirarse si el español Jorge Segovia triunfaba en las elecciones del fútbol local en noviembre (como sucedió), puede terminar durante este fin de semana tras intensas negociaciones con la nueva directiva presidida por Sergio Jadue, precisó DPA.
La victoria de Segovia fue anulada por un resquicio legal y en una nueva votación Jadue se impuso a Harold Mayne Nicholls, antiguo presidente y gran aliado de Bielsa. Sin embargo, el nuevo jefe del fútbol chileno está esforzándose por lograr un clima de entendimiento con el venerado técnico.
Bielsa ha dado señales positivas. No sólo está abierto al diálogo, sino que junto a su cuerpo técnico prepara el amistoso contra Paraguay del 9 de febrero.
El "Loco" viajó con la selección chilena a California y la dirigió ante Estados Unidos el pasado sábado, situación que fue considerada como una muestra de sus ganas de conocer a la nueva directiva y trabajar en algo que considera básico: generar confianza.
"Vuelvo", dijo escuetamente a los periodistas antes de embarcarse a Chile tras el empate 1-1 con Estados Unidos.
Desde entonces ha aumentado la expectación de medios e hinchas por una respuesta definitiva del argentino, que evalúa mantenerse en su cargo por lo menos hasta la Copa América que se disputará en Argentina.
Según cercanos al técnico, las razones que lo motivan a quedarse se relacionan con sus principios: el compromiso con un proyecto y la gratitud con jugadores e hinchas, quienes incluso organizaron marchas para manifestarle su apoyo.
"¿Qué valoro de lo que me tocó vivir? Que despertó mi vocación, puso en juego los aspectos que tienen que ver con la vocación: uno lo hace por más que no sea necesario, lo hace porque le produce felicidad. Dirigir a Chile me despertó amor por la tarea, amor por la vocación", señaló Bielsa en la extensa conferencia de prensa que dio en noviembre pasado.
Bielsa disfruta en Santiago de una vida casi monacal en el complejo deportivo Juan Pinto Durán, donde reside en dos piezas de madera, camina hasta el mercado aledaño a comprar verduras y visita a sus vecinos para sus cumpleaños y fiestas privadas.
"Me han abierto sus casas", dijo el seleccionador.
En medio de la incertidumbre ante un indeciso Bielsa, hasta el presidente Sebastián Piñera ha manifestado su deseo de que el argentino siga al mando de la selección, llamándolo a "no dejar obras inconclusas".
Jadue, en tanto, ha manifestado su compromiso con el proyecto del entrenador y ha asegurado que tendrá todas las garantías para seguir con su trabajo, aunque con la cautela de no revelar las negociaciones a la prensa.
"Se están haciendo los esfuerzos necesarios y que vamos a informar cuando corresponda", sostuvo el viernes el vicepresidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional, Mauricio Etcheberry.
Mientras evalúa su decisión final, Bielsa sigue obsesionado con su trabajo y junto a su cuerpo técnico prepara el partido ante Paraguay, un amistoso que podría confirmar el apego que el Loco tiene con Chile.
Fuente: deportes.eluniversal.com
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