El Athletic progresa. El sábado ya exhibió una palpable mejoría en su juego frente al Villarreal, pero fue incapaz de transformarla en una victoria que mereció con creces. Esta noche ha conservado todo lo bueno que había ofrecido hasta ahora, ha pulido algunos detalles y se ha dado un baño de moral al imponerse con holgura al Paris Saint Germain, una escuadra armada a golpe de talonario, que aspira a convertirse en un grande de Europa y que ha sucumbido ante el empuje de los rojiblancos. Sobre todo, en una primera parte en la que San Mamés ha disfrutado con el fútbol trenzado y vertical de su equipo, que ha tenido lo que le había faltado hasta ahora en los momentos más inspirados de la temporada: pegada para noquear a su rival.
El Athletic se ha impuesto con solvencia y dosis de muy buen juego al gallito de su grupo en la Europa League. La segunda victoria de la liguilla, en la que está ofreciendo la versión más cercana al fútbol que pretende Bielsa y en la que es líder con seis puntos, tres por encima del Salzburgo (próximo rival, el 20 de octubre en San Mamés a las nueve y cinco de la noche), que hoy ha ganado 3-0 al Slovan de Bratislava, y del PSG. Dos triunfos de dos. Un paso de gigante para pasar a la siguiente ronda y una inyección de moral para remontar el vuelo en la Liga. A ser posible, a partir del próximo domingo en el derbi de Anoeta (12 horas).
Con Aurtenetxe en el lateral izquierdo, De Marcos de mediocentro y Gurpegui en el banquillo (reservado para el encuentro de contra la Real Sociedad, quizá para jugar de central en lugar del sancionado Ekiza), el Athletic se ha quitado rápido el miedo que le produjo un efímero arreón inicial del PSG. Fueron dos golpes, apenas un par de minutos, hasta que los de Bielsa se adueñaron del balón e imprimieron un ritmo endiablo al juego. No sólo cuando tenían el esférico en su poder, sino también con una agobiante presión a los franceses, desbordados por el despligue físico y táctico del cuadro local. Metió la quinta, velocidad de crucero, buscando la referencia de Fernando Llorente en los primeros minutos. El riojano lo ha intentado, pero no ha podido, incordiado en todo momento por un pegajoso Lugano, bien en la marca, en ocasiones incluso al borde del reglamento. Igor Gabilondo ha abierto el marcador después de una internada y un magnífico centro desde la derecha de un De Marcos que ha firmado un partido de sobresaliente (le da igual donde le coloquen: cumple siempre; algunas veces, como hoy, mejor que otras). El guipuzcoano ha firmado un gol de bella factura: un espléndido voleón con la zurda ante el que nada ha podido hacer el portero del PSG.
Los franceses, a partir de ahí, se han tratado de animar y el Athletic, por ese despliegue sobre el terreno de juego, ha bajado el pistón. Ha habido peligro (Iraizoz ha tocado el balón fuera del área con la mano, con sólo una amarilla como sanción), con un tiro de Bodmer desde lejos, otro de Nené y Tiéné. Pero Susaeta ha rematado otro gran centro de Aurtenetxe, ahora desde la izquierda, para poner el segundo y definitivo tanto en el marcador al filo del descanso.
Con el marcador encarrilado y un Athletic bien situado en el campo, la segunda parte ha pasado sin historia y sin que en momento alguno peligrara la victoria rojiblanca. Las notas más destacadas de esos 45 minutos quizás hayan sido el estreno de Ibai Gómez (reaparecía en San Mamés, donde se lesionó en su debut la pasada temporada) o la herida en un gemelo que se ha llevado Muniain tras una violenta entrada de un defensor galo. El PSG tampoco ha inquietado en exceso y el equipo de Bielsa se ha limitado a guardar fuerzas para el derbi del domingo.
FUENTE: http://www.canalathletic.com
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